El cabello es muy delicado y sensible. Muchas veces lo maltratamos sin darnos cuenta, abusando de tintes, del secador, plancha... Debemos de ser muy cuidadosos con él y darle sus cuidados necesarios o no utilizar productos que lo dañan considerablemente con abuso. A las 3 semanas de aplicar el tinte, las raíces comienza a verse considerablemente, obligándonos a tintar de nuevo el cabello cada pocas semanas. Por eso, utilizando unos sencillos trucos podemos alargar la duración de nuestro tinte, mejorando la salud de nuestro cabello, ahorrando tiempo y dinero en visitas a nuestra peluquería.

NO aclares la raíz.

La raíz siempre debe permanecer con un tono natural lo más parecido a tu color o dejarla de tu color de cabello. Cuanto más aclares la raíz, el contraste en tu cabello y el tinte será mayor. Por lo tanto, conforme vaya creciendo tu cabello, las raíces desentonarán demasiado produciendo un efecto en tu melena indeseable.

Las raíces siempre tienen que ser más oscuras que las puntas, además, la diferencia de color entre las puntas y la raíz no debe desentonar demasiado. El cabello tiene que seguir un tono que se vaya degradando uniforme y progresivamente.

Mejor empezar por mechas antes que tinte.

Lo ideal, es aplicar mechas al cabello antes de teñir completamente tu cabello y encadenarte a la peluquería para toda la vida. De esta manera, el cabello crecerá y tus mechas quedarán disimuladas, sin necesidad de teñirte de nuevo al poco tiempo, pudiendo alargar unas cuantas semanas tu visita a la peluquería.

Dejar las canas transparentes.

Si cubrimos la cana demasiado, con el paso del tiempo y el crecimiento de nuestro cabello, será mucho más visible que antes de teñirla. Para evitar ese efecto tan desagradable hay que aplicar un tinte "tono sobre tono" de un color más claro que nuestro cabello natural, para que la cana quede transparente.

Cuidados para el cabello teñido.

Una vez nuestro cabello está teñido, debemos poner énfasis en buscar el champú ideal para el tono de tinte que nos hemos aplicado. Siempre debemos utilizar champús profesionales, ya que mejorarán la calidad de nuestro cabello, y alargarán la intensidad y la duración del color. Sí tenemos un tono gris o blanco, tendremos que utilizar un champú con pigmentos violetas o azules, cuando nuestro cabello es rubio, lo mejor será un champú especial para rubios, tanto si es un rubio frio como si es un rubio cálido y para los cabellos morenos, castaños o rojizos, los champús para cabello teñido son ideales.

Éstos son unos simples cuidados que te proporcionarán un cabello más sano y fuerte, disminuyendo tus visitas a la peluquería y alargando la duración de tu tinte, teniendo siempre presente que, si exponemos durante excesivo tiempo nuestro cabello a las radiaciones solares, tendremos que utilizar un acondicionador sin aclarado que nos proporcione protección UVA/B.